Relatos

2024. Este libro es una maravilla y, como tal, se compone de espanto y de ternura. Es una fuente que hace brotar historias desde la cual poder pensar distinto muchas «cosas» que creímos saber. Puede leerse como una novela de aventuras, como etnografía, como informe científico o como varias piezas de ese gran puzle que vamos completando con cada lectura: el del pasado que nos hace ser quienes somos. Las memorias aquí expuestas se basan en los apuntes escritos por Otto Nordenskjöld durante los siete meses que pasó en la isla Grande de Tierra del Fuego y otros cuatro más recorriendo de Punta Arenas a las estepas orientales y, desde allí, a las sierras al norte de las hoy famosas Torres del Paine. Desde fines de 1895 hasta comienzos de 1897 —un período brutal y veloz de ocupación ovejera—, Nordenskjöld avanza observando y preguntando para formarse así una opinión fundada. Estudia sedimentos, plantas, animales y personas; averigua al alojar en las casas señoriales de estancieros británicos; comprende viajando sin lujo alguno con baqueanos, «hombres rudos», funcionarios argentinos y chilenos y ciudadanos de tantos otros confines; acumula muestras sea abriendo rocas o separando de «los huesos la masa medio descompuesta» de los cuerpos de selknam asesinados y hechos desaparecer.